Albergue Easy Housing

Vine con mi prima, el hostel es práctico y limpio. La ubicación que pensé que estaba aislada está en realidad bien ubicada, tenga en cuenta que Praga es una ciudad pequeña. Nos encontramos con otros estudiantes ERASMUS con los que pudimos charlar, muy amables. Lo recomiendo para gente joven.

Magnífico albergue bien equipado y personal agradable. El personal amablemente nos alojó en una habitación para dos personas a pesar de que habíamos reservado una habitación para cuatro personas.

Uno de los edredones estaba manchado, la habitacion ponia que era para 6 y habia siete camas, siete personas, el chorro de la ducha es súper débil y no estaban limpias en el suelo. El personal muy majo.

El albergue esta super bien, las habitaciones son amplias y las camas no matan. No hay taquillas en la habitación, estan en la sala común. Aun así, si que hay un armario. La mujer de recepción habla perfecto ingles i es muy amable!!

Por primera vez en una posada, quedamos bastante satisfechos con este establecimiento. Obviamente, no todo fue perfecto, pero a menudo es el caso cuando todos no respetan el aspecto colectivo de este tipo de lugar. No está muy lejos del centro de la ciudad (25 minutos a pie), y no es caro. El funcionamiento del albergue es simple y claro, y los gerentes no son intrusivos. Nivel de limpieza, podría haber algo mejor, pero esto es posible solo si todos demostraron saber cómo vivir. Sea como fuere, esto no resta valor a los posaderos que se toman en serio el mantenimiento de su establecimiento y la limpieza de la ropa de cama. Nivel de calidad, compartimos dormitorios lo suficientemente pequeños para las personas que deben vivir juntas (literas para 8 personas), pero para una estancia corta, se agradece. Dos únicos defectos en mi opinión: la posibilidad de la falta de conocimiento de vivir con personas con las que vivimos juntos y la falta de espacio para almacenar nuestras cosas. Es decir, debemos confiar en las personas con las que dormimos para que no nos roben, ya que el tamaño de la habitación no permite colocar el almacenamiento planeado para este propósito. Después, tenemos algo de seguridad además de la confianza, ya que hay cámaras de vigilancia en el albergue. Y diferentes códigos para cada asignación de habitación, de modo que solo los ocupantes de la habitación puedan ingresar. O no estamos al máximo de lo que es posible hacer el nivel de seguridad, pero por todo eso, existe la voluntad de intentarlo. Si volvemos a Praga, otros amigos, ¡este hostal es recomendable! Como pareja o como familia, quizás un establecimiento con un poco más de privacidad sería más adecuado. Que tengas una buena estancia!

La bienvenida en el albergue era sorprendente con una recepcionista cuya estatura servido como un molde al horno, y sobre todo con un aparcamiento no está presente que había que pagar además de un particular (que ofrece una muy bien en otros lugares). Tomé este albergue para el estacionamiento, ¡me jodí! Hay que saber que para cerrar las puertas hay que dar un portazo (obligatoriamente) y es todo un concierto de averías que empieza desde las 23h hasta las 9h. No hay limpieza regular en los baños (duchas y baños). No hay papeleras en las duchas y en las áreas comunes. Mal aislado. Realmente decepcionado, no volveré.

Une personne charmante nous a accueilli et conseillé sur les bus n ayant pas encore de monnaie elle nous a avance l argent pour le bus. Bâtiment très propre vaisselle, frigo congélateur

Las habitaciones eran espaciosas aunque en la habitación entraba mucha luz. Los baños estaban hechos un asco. No está cerca del centro aunque Praga no es muy grande. Pero en Uber es muy barato viajar

Hostal más que bueno por el precio.

Es una gran oportunidad para las personas que desean visitar Praga y no gastar demasiado dinero. Las habitaciones son bastante ásperas: solo una cama con una mesa pequeña, pero justo detrás de la puerta hay una sala común donde se puede cocinar algo o simplemente sentarse en el sofá. Además el personal es realmente servicial y comunicativo. ¡Recomendado!

El personal nos orientó con el albergue y ella fue de gran ayuda a la hora de proporcionar consejos para recorrer el lugar. Nuestras habitaciones estaban limpias y cálidas.

Aunque la ubicación está un poco lejos del centro de la ciudad, hay una parada de tranvía cerca y una tienda de comestibles a la vuelta de la esquina que está abierta los 7 días de la semana. Los muebles son bastante nuevos y el albergue se mantiene ordenado regularmente.