Albergue 94

Pagamos el hostal con desayuno incluido, más esto nunca sucedió

El albergue cumplió parcialmente con nuestras expectativas en cuanto a precios, sin embargo, requeriría un mínimo de limpieza, calefacción y comodidad. No nos ofrecieron desayuno. El servicio de Andrew fue muy agradable y nos ayudó a navegar. El equipo de limpieza simplemente vacía las papeleras y "limpia" parte del suelo, olvidándose de la ducha, los aseos y los dormitorios. No usábamos la cocina, por miedo a encontrarnos con pequeños camaradas tipo bicho. No recomendado en invierno.

La condición de la habitación no era buena necesita mejoras. solo está bien quedarse una noche.

Problema: no hay acceso a una computadora ni a una impresora para editar boletos aéreos

Por 10€ estaba bien, però en mi caso, el baño estaba muy sucio y era pequeño. La cocina estaba un poco antigua. Las ganas estan comodas però los cojines se tendrían que cambiar.

Me encanta este albergue, así que me alojé aquí de nuevo en unas segundas vacaciones en Malta. Estar a solo una cuadra del paseo marítimo de Sliema y los hoyos para bañarse es un gran beneficio. Además, las habitaciones tienen un gran ambiente con balcones tradicionales y suelos de baldosas, además de camas literas y armarios espaciosos. El personal trabaja arduamente para acomodar a los huéspedes, ¡gracias también por ser apto para bicicletas! El único inconveniente es el espacio estrecho de la cocina, pero nunca tuve problemas para cocinar mis comidas diarias de pasta.

El albergue se encontraba en el centro de Sliema, cerca de la playa, que era agradable, excepto que el albergue está situado sobre una calle bastante ruidosa. Hay casilleros disponibles y había una cocina, que estaba bien. El albergue estaba limpio, excepto que la cama y las sábanas tenían algunos pelos. El cabezal de la ducha no pudo ser conectado. El hostal estaba bastante bien. Le faltaba un poco de ambiente para mi gusto.